Tal vez te imagines a muchos árabes comiendo estos tacos en el lejano Medio Oriente, pero la realidad es que los Tacos Árabes nacieron en Puebla, México. Su historia se remonta a la primera mitad del siglo XX, cuando una gran ola de inmigrantes provenientes de Líbano, Siria e Irak llegó a México escapando de los conflictos en sus países de origen. Al establecerse en Puebla, descubrieron la vibrante escena de los tacos mexicanos, pero debido a sus tradiciones alimenticias, adaptaron la receta a su estilo: en lugar de carne de cerdo, usaban cordero o res, y sustituyeron la tortilla de maíz por pan árabe, una especie de pita o tortilla de harina gruesa.
Otro elemento clave en su preparación original era la cocción al carbón, una técnica heredada de los kebabs y shawarmas de Medio Oriente. Además, acompañaban la carne con una salsa especial conocida como "salsa California", hecha con chipotle, aceite de oliva y especias.
Con el tiempo, la receta se adaptó aún más a los gustos y disponibilidad de ingredientes en México, y la carne de cerdo se convirtió en la opción más común debido a su accesibilidad y menor costo. Sin embargo, la esencia de los tacos árabes sigue viva, combinando especias aromáticas, un toque de ahumado y la suavidad del pan árabe.
Si quieres experimentar esta fusión de culturas en tu propia cocina, aquí te enseño cómo preparar estos tacos desde cero, manteniendo su autenticidad pero con la flexibilidad de adaptarlos a tus preferencias.
Ingredientes (4-6 porciones)
Para la carne
1 kg de lomo de cerdo, pierna de cordero o falda de res
4 dientes de ajo picados
2 cucharadas de orégano seco
1 cucharadita de comino molido
1 cucharadita de pimienta negra molida
1 cucharada de sal
1 cucharadita de paprika
½ cucharadita de canela en polvo
½ taza de vinagre blanco
2 cucharadas de jugo de limón
3 cucharadas de aceite vegetal
Para el pan árabe (tortilla de harina gruesa)
3 tazas de harina de trigo
1 cucharadita de sal
1 cucharadita de polvo para hornear
¼ de taza de manteca vegetal o aceite
1 taza de agua tibia
Para la salsa de chipotle o "salsa California"
3 chiles chipotles secos
2 tomates
1 diente de ajo
½ taza de agua
½ cucharadita de sal
1 cucharada de aceite de oliva
Para acompañar
Cebolla blanca finamente picada
Cilantro fresco picado
Limones partidos
Preparación Paso a Paso
1. Marina la carne para potenciar el sabor
Corta la carne en tiras delgadas para que absorba mejor los sabores. En un tazón grande, mezcla el ajo, orégano, comino, pimienta, sal, paprika, canela, vinagre, jugo de limón y aceite. Añade la carne y mezcla bien para que se impregne de los condimentos.
Tapa y deja marinar en el refrigerador al menos 4 horas, pero si puedes dejarla toda la noche, mucho mejor. Esto hará que los sabores se intensifiquen y la carne quede más jugosa y aromática.
Tip de chef Yerika: Si quieres un sabor más profundo, puedes agregar una pizca de clavo de olor molido y una cucharadita de yogur natural a la marinada.
2. Prepara el pan árabe casero
En un tazón, mezcla la harina, sal y polvo para hornear. Agrega la manteca vegetal o aceite e integra con las manos hasta que la mezcla tenga una textura arenosa. Vierte poco a poco el agua tibia y amasa hasta obtener una masa suave y elástica.
Divide la masa en porciones del tamaño de una pelota de golf y deja reposar cubiertas con un paño húmedo por 30 minutos.
Estira cada porción con un rodillo hasta formar discos de aproximadamente 15 cm de diámetro. Cocina en un comal caliente por 1 minuto de cada lado hasta que se inflen ligeramente y queden cocidos.
Consejo: Si prefieres, puedes usar tortillas de harina comerciales, pero el pan árabe casero le da un toque más auténtico.
3. Cocina la carne para un sabor auténtico
Si tienes un asador vertical o un trompo, ensarta la carne y cocina a fuego medio, girando constantemente hasta que quede bien dorada por fuera y jugosa por dentro.
Si usas sartén o parrilla, caliéntala bien y cocina la carne en tandas, sin amontonarla, para que se dore parejo. Cocina por 8-10 minutos moviéndola ocasionalmente hasta que esté dorada y cocida por dentro.
Tip clave: Para un toque ahumado, puedes cocinar la carne en un sartén de hierro fundido y agregar unas gotas de jugo de limón mientras se dora.
4. Prepara la salsa de chipotle ("salsa California")
Tuesta los chiles chipotles en un comal caliente por unos segundos hasta que suelten su aroma. Hierve los tomates con los chiles por 5 minutos y licúa con ajo, agua, aceite de oliva y sal hasta obtener una salsa espesa.
Variación: Si quieres una salsa más cremosa, añade una cucharada de jocoque o crema ácida.
5. Arma los tacos y disfruta
Calienta el pan árabe en un comal. Coloca una porción generosa de carne en cada uno, agrega cebolla, cilantro y un toque de salsa de chipotle. Acompaña con limón al gusto.
Consejo de presentación: Para una experiencia aún más auténtica, envuelve los tacos en papel estraza como se sirven en Puebla.
Los Tacos Árabes de Puebla nos enseñan cómo las migraciones han enriquecido la gastronomía mexicana. Su combinación de especias, su cocción lenta y el toque del pan árabe los hacen únicos en sabor y tradición. Aunque hoy en día se preparan mayormente con carne de cerdo, su origen está ligado a la carne de cordero y res, respetando las raíces culinarias de quienes los trajeron.
Si quieres un sabor aún más tradicional, prueba hacerlos con cordero y cocinarlos al carbón. La clave está en la marinada y en respetar la sencillez de los ingredientes. Anímate a prepararlos y descubre por qué este taco se ha convertido en un ícono de la gastronomía poblana.
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